Cuando se trata de Rocky y el gimnasio no basta con una… Una repetición no es suficiente, una serie tampoco es suficiente. Ni siquiera todo un entreno es suficiente.
Así es, cuando se está tan musculado como Rocky, tan bien dotado como Rocky, y tiene tanto esperma acumulado en las pelotas como para correrse interminablemente, chorro tras chorro brotando con fuerza de su polla, hace falta más de un pasivo para que salga satisfecho.
Afortunadamente para Rocky, hoy tiene a dos afortunados pasivos como Hudson y Chris, que han acudido al gimnasio con él para ayudarle con las pesas y compitiendo entre ellos para ver quien es capaz de complacer mejor a Rocky.
A Rocky le encanta tener a Hudson y Chris a su merced, porque cuando la boca de uno necesita descansar la del otro le releva para mamarle la polla; cuando cualquier de ellos cae de rodillas para engullirla hasta las pelotas, el otro está ahí para ofrecerle su dura polla a Rocky; cada vez que uno de los pasivos necesita una pausa siendo empotrado incansablemente por Rocky, el otro ya está listo para entregar su ojete y que siga haciéndolo con él.
Posiblemente este gimnasio nunca ha visto sudar a dos jóvenes sementales de la manera como Rocky se ocupa de Chris y Hudson hoy, como probablemente tampoco se habrá visto a dos pasivos tan ansiosos y entregados a satisfacer a un activo.
Comments