En pijama, Trevor pensaba pasarse una tarde de sofá y manta disfrutando del partido delante de la televisión, pero su escándaloso hermano irrumpe en el salón con su colega Clark para acabar con la tranquilidad.
Invadiendo el sofá, el musculoso Clark le planta en la cara a Trevor su sobaco sudado y maloliente, pero a él no parece importarle… ¡le encanta!
A partir de ese momento el partido pasa a un segundo plano y Trevor solo se preocupa de que Clark vea más su culo que la pantalla y el musculoso chulazo empieza a masajeárselo con el pie. Aprovechando que su hermano va a la cocina en busca de algo para picar, Clark puede follar la boca de Trevor finalmente y disfrutar con su experta mamada.
Antes de que su hermano vuelva con una bandeja de nachos, Trevor se sienta sobre la dura verga de Clark, cabalgando bajo la manta que oculta lo que realmente pasa ahí debajo.
Una oportuna llamada de su novia vuelve a dejar a solas en el sofá a la fogosa pareja y Clark sigue follando a Trevor, ahora a cuatro patas en el sofá.
Tras embadurnarle la polla y las pelotas con la salsa de queso, Clark le lame todo hasta dejárselo reluciente, pero su culo musculoso también necesita que se lo follen.
Trevor embiste el culazo de Clark, follándoselo en la postura del misionero hasta que el musculoso chulazo no puede más y suelta una enorme corrida sobre sus abdominales, pronto igualada por Trevor, que saca su polla para cubrir de semen caliente la de Clark sorprendiendo al hermano cuando vuelve al salón.
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