David y Guido son dos de los chulazos recién llegados a este estudio y ambos llevan vello sobre sus bellos rostros, sea en barba o en bigote, aunque no es lo único que comparten...
Los dos entran en contacto paseando al aire libre, besándose, posando bajo los árboles y mostrando sus físicos atléticos con tanto detalle que a David se le pone el vello de punta.
Y si bajo el sol ya habían saltado chispas, el “incendio” continúa entre cuatro paredes, a medida que se desnudan el uno al otro en el dormitorio. Cuando David clava sus ojos y su lengua en le rosáceo ojete de Guido solo puede exclamar: “¡GUAU!”
El pasivo le mama la polla antes de que David se folle a Guido haciendo la cucharita. “¡Joder, que bueno!” exclama Guido entre gemidos de placer. “¡TU eres jodidamente bueno!” le replica David sin dejar de penetrarle.
Está visto que esta pareja no parece tener suficiente en el sexo, porque David pasa a empotrar a cuatro patas a Guido y después este cabalga montado sobre su verga como un experto jinete.
Llegada la hora del orgasmo, Guido nos sorprende con una impresionante corrida tumbado de espaldas y con la polla de David follándole hasta que ya no puede más y la saca de su culo para que ordeñe hasta la última gota de semen caliente de sus pelotas.
¡Menos mal que esperaron a llegar a la casa para follar de esta manera, porque de lo contrario podrían haber provocado un verdadero incendio forestal!
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