Evan y Diego son pareja en la vida real y se meten juntos en la sauna después de haber entrenado duro en el gimnasio.
Aprovechándose de que la tienen para ellos solos, pronto agarran sus duras pollas para masturbarse por debajo de las toallas.
Evan gatea hasta Diego para mamarle la polla, besándole todo el pecho hasta que este pone a cuatro patas a su novio para lamerle el ojete y follárselo sobre uno de los bancos de la sauna.
Diego no se conforma con eso y empotra a Evan contra la pared, embistiéndole por detrás.
Evan también tiene iniciativa y cabalga montado sobre la verga de Diego hasta correrse, pidiéndole acto seguido que se le corra en el culo.
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